Hace un tiempo necesitaba sonreír con urgencia. Había tenido muchas decepciones personales y andaba bastante bajo de moral. Recuerdo que aún estaba estudiando en la universidad y cada día mi viaje en tren me llevaba unos 80 minutos. Aquel tiempo, lejos de aburrirme, lo utilizaba para leer y escuchar música: un tándem perfecto para desconectar de mi, por entonces, penosa existencia.
Encadenaba una novela con otra, sin dejar de tener un libro de reserva en la mochila. Y entonces me atreví a comprar un libro verdoso, llamado 'El Color de la Magia'. Había escuchado maravillas del autor en cuestión, pero jamás me había dado por comprarme un libro suyo. Poco tiempo tardé en darme cuenta que aquel era un libro especial. Y es que me hacía sonreír y ver las cosas bajo otro punto de vista.
Ayer andaba por Twitter cuando me percaté de que era TT. Era algo extraño, pero pensé que se trataría de la salida de su nueva novela o algo parecido. Recibí la noticia como un martillazo en el estómago y, no me cuesta admitir, que acabé soltando unas lagrimillas.
Desde aquí darte las gracias Terry, por aquellas sonrisas en el tren mientras me adentraba en tu Disco. Siempre será grato volver a releer tus novelas, pasen los años que pasen.
